Madurismo y oposición hacen megaesfuerzos para entregar el país a los gringos
El gobierno de Nicolás Maduro y la oposición, tienen más puntos de coincidencias que divergencias, pues ambos se esfuerzan en destruir, a cualquier costo, la ideología chavista para facilitarle a las familias petroleras de Estados Unidos, hacerse de petróleo barato y endeudar el país con los créditos hambreadoras del Fondo Monetario Internacional FMI, Banco Mundial y Banco Interamericano de Desarrollo, cuyas estrategias financieras son las mismas: recorte de subsidios, reducción del gasto social, reducción del tamaño del Estado, es decir, despedir trabajadores, aumento de gasolina y elevada inflación, condiciones labradas por Nicolás Maduro para facilitarle a la oposición, en caso de conquistar el poder, recurrir sin tropiezos a la banca mundial.
Por su parte la oposición silenciosamente ejecuta un paro empresarial, consistente en cierre de todas las industrias del país para doblegar por hambre a los venezolanos, calificando al mismo tiempo de desastrosas las políticas públicas puestas en marcha por el presidente Hugo Rafael Chávez Frías, según ellos, así borrarían con hambruna la ideología chavista para evitar que otro líder como aquel resurja y altere el panorama político latinoamericano y la paz, de la que tanto provecho económico han obtenido las transnacionales norteamericanas.
Las peleas entre el Madurismo y la oposición son meros celos matrimoniales, pues ambos hacen exactamente lo mismo. Gobernadores, alcaldes, ministros, diputados nacionales, directores del Ejecutivo Nacional y de otras instituciones públicas, se rodearon de un pequeño grupito de contratistas y proveedores a quienes entregan todo el presupuesto de inversión y cobran 20% de soborno que les permitas amasar jugosas fortunas. Lo de ponerle el pecho a las balas por los pobres es la más cruda hipocresía. Los pobres son utilizados en los procesos electorales y después tienen que conformarse con ver a los gobernantes comerse el presupuesto hasta los huesos.
En estos momentos cuando la escasez de alimentos y medicamentos alcanza su punto más crítico, la oposición amenaza con cerrar las ultimas empresas abiertas y Nicolás Maduro respondió eliminando el programa de suministro de alimentos del Gobierno Nacional, antes había eliminado varias misiones y reducido al mínimo el suministro de medicamentos a la Misión Barrio Adentro, cuyo suministro depende en 100% del gobierno nacional.
Recuerde que Maduro premeditadamente devaluó la moneda el día que murió Hugo Chávez, lanzando un manto de dudas sobre su fidelidad al difunto presidente, y ahora, prefiere hacer gastos superfluos, que atacar con creces la escasez que ya está generando hambruna entre millones de venezolanos pobres que no encuentran como conseguir: arroz, espagueti, azúcar, leche, aceite y mucho menos pollo y carne.
El amor que la oposición liderada por Henry Ramos Allup difunde a los cuatro vientos por los pobre de este país, no es más que una desmedida ambición de poder y avaricia para echarle manos al presupuesto nacional y entregarle los restos de este país a los gringos.
El clamor de los venezolanos exigiendo el resurgimiento de otro Hugo Chávez es un sentimiento que recorre este país de costa a costa, pues comenzaron a ver florecer las macabras garras de la traición en un presidente que aún se ufana de ser hijo de Hugo Chávez, pero un hijo rebelde sobre el que hay que mantener ojo pelao, ya que mucho parece ser hijo de George Bush.
Venezuela es de Jesucristo
Andrés García Bolívar
Pastor iglesia evangélica: “El Evangelio Eterno”
Teléfono: 04161067319
Andresgarbo3510@gmail.com
Andresgarbo@hotmail.com
Lea más artículos: