Crisis humanitaria en sur venezolano
Aunque el presidente Nicolás Maduro niega el comienzo de una profunda crisis humanitaria, en el sur venezolano el hambre comenzó a afilar sus garras entre miles de familias pobres que no encuentran arroz, espagueti, azúcar, leche y aceite, debido al agudo desabastecimiento de estos productos, provocado por una oposición liderada por el presidente de la Asamblea Nacional Henry Ramos Allup, para sacar al Presidente del poder, y asumir ellos el control total de un gobierno, que en estos momentos, no ve salida a la crisis y escasea de propuestas alternativas para hacer frente a la criminal arremetida de una oligarquía empresarial, apoyada por Estados Unidos, que dispuso de mil millones de dólares, a través de la USAID, para cancelar el cierre y perdidas de empresas productoras de bienes de consumo masivo.
El mayor peso de la crisis recae sobre familias indígenas y campesinas, las más pobres del país, a las que muy poco llegan los beneficios del gobierno nacional, y donde los productos de la cesta básica alcanzan precios dos veces más costoso que los vendidos en centros urbanos. Productos como: arroz, espagueti, azúcar, harina precocida y otros, cuando se consiguen, obligatoriamente hay que cancelar hasta dos mil bolívares por kilogramos, en una región donde el ingreso percápita está próximo al salario mínimo de 11.400 bolívares mensuales y donde la tasa de desempleo ronda el 60%.
Los líderes indígenas de la región sur, el opositor Liborio Guarulla gobernador de Amazonas y la chavista Nicia Maldonado, presidenta de Corpoamazonas, que bien pueden comprar alimentos en el norte de Brasil para aliviar la crisis, no lo harán, pues, ambos pertenecen al Vicariato Apostólico de Puerto Ayacucho, y por ende, apuestan a la caída del presidente Nicolás Maduro, a través de una revuelta popular por hambre, de allí que invierten los recursos en construcción de obras que reportan 20% de soborno, cobrado a contratistas y proveedores, permitiéndoles exhibir la millonaria fortuna que hoy disfrutan, ante un pueblo pobre conformado con verlos comerse el dinero de todos, en una región donde la desnutrición infantil, anemia y parasitosis, comenzaron a mostrar las garras de la muerte.
Guarulla, de espalda a su pueblo indígena que lo llevó al poder cuando era pobre, planifica marchas y cadenas humanas los jueves para exigir la salida del presidente y demandar la reincorporación de los diputados compra votos, Nirma Guarulla, su hermana, y Julio Igarza, que durante diez años en el parlamento nacional, sólo calentaron butacas, hicieron turismo parlamentario y entre bostezos levantaron perezosamente la mano para aprobar el trabajo de otros, pues, son legisladores flojos y sin ideas, beneficiados con compras y contratos otorgados por el gobernador.
Nacionalmente la oposición, más allá de querer poner manos al presupuesto nacional y disponer del negocio petrolero para incrementar su millonaria fortuna, no presenta proyectos de país, antes hacen lo mismo que la oligarquía rojita, amontonar dinero a manos llenas, como lo hizo el padre José Palmar, líder de la oposición venezolana, quien apareció en los Papeles de Panamá con 28 millones de dólares depositados en una cuenta, a nombre de una fundación fantasma en el Estado Zulia, confirmando lo que este humilde pastor denuncia desde su rancho en Puerto Ayacucho, el derroche de dinero de la Iglesia Católica en complicidad con el Estado. Dinero de los más pobres que el Cardenal Monseñor Urosa Savino y su grupo de monseñores y curas se embolsillan, privatizando edificaciones construidas por el gobierno, como: escuelas, universidades, tecnológicos, hospitales, ambulatorios, edificios y otros bienes, de los que además, la nación paga electricidad, personal y subvencionan a través de la Asociación Venezolana de Educación Católica AVEC, un supuesto déficit, que le permite a estos buitres hambrientos quitarles el pan de la boca a millones de niños de este país, que ahora ellos mismos asesinan con hambre, en complicidad con Estados Unidos.
Hay que revisar el presupuesto entregado a la Iglesia Católica y saltarán a la vista de todos, las decenas de fundaciones fantasmas, proyectos cobrados y no ejecutados, y negocios sucios de una empresa transnacional católica dedicada a amontonar riqueza a nombre de Cristo, bajo una supuesta lucha en favor de los más pobres, aunque nadie come de los curas, solo regalan bendiciones y agua bendita.
Venezuela es de Jesucristo
Andrés García Bolívar
Pastor iglesia evangélica: “El Evangelio Eterno”
Teléfono: 04161067319
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Andresgarbo@hotmail.com
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